Una Despedida que No Vale la Pena

Puntuación: 3 de 5.

Me di cuenta de dos reseñas que se quedaron en borradores el año pasado, lo que sucede cuando sale mucha música al mismo tiempo. Las estoy reponiendo y esta es la primera y Adele vendrá después.

El álbum que pretende ser despedida de Iron Maiden no es ni con mucho lo que solía ser hace ya unos años y se siente como un ejercicio solo para dejarle saber a su público que no están muertos.

Senjutsu es el álbum diecisiete del grupo y es uno en el que solo encontramos algunos momentos interesantes, el solo de guitarra en «The Time Machine», el principio de «Darkest Hour» y algunas instrumentaciones adicionales pero es muy poco lo que podemos recuperar en el resto que suena apagado y como un viaje a lo que ya han dicho y hecho en otras ocasiones.

Las letras siguen igual de crípticas como solo Bruce Dickinson lo sabe hacer hablando sobre la guerra, la estrategia y, un ídolo personal, Winston Churchill, quien a pesar de todos sus defectos mantuvo unida a Inglaterra en su «Hora mas Oscura».

En el lado de la música Adrian Smith hace lo que puede, ese solo en «Darkest Hour» es muy fino, pero la inspiración y las mejores canciones vienen de la mano del guitarrista Janick Gers que llegó a reemplazar a Smith y cuando este regresó se quedó como un tercera guitarra en el escenario, pero el inicio de «Lost in a Lost World» que parece sacado de un álbum de The Moody Blues no les hace ningún favor, es horrible.

Hay cosas rescatables aquí y para mí siempre será una de las bandas de cabecera pero este no es uno de mis álbumes favoritos, su último gran álbum es del 2006. A Matter of Life and Death. El resto es relleno.

3/5 estrellas redondeadas a 3.5 porque es Iron Maiden.

Mientras mas Viejo es mas Fresco Suena Elvis Costello

Puntuación: 4 de 5.

El año pasado sacó un álbum divertidísimo y al parecer eso revitalizó a nuestro viejo amigo Elvis Costello ya que su nueva producción suena vital, fresca y divertida como era todo lo que producía a finales de los años setenta cuando inició en medio de un marasmo que solo sonaba punk en el radio y en el que los elefantes del rock y rock progresivo estaban muriendo lentamente.

Elvis Costello & The Imposters nos traen un álbum con 13 canciones que deben de contar alguna historia, pero con las letras de Costello pocos pueden ya que siguen su propia métrica, rima y su significado siempre es críptico. The Boy Named If nos lleva a las canciones cortas por las que siempre ha sido conocido y sonidos que van del mas puro rockabilly al rock suave pasando por el pop y algo de reggae con una voz que no ha perdido un ápice en su premura por girar el mundo alrededor de un grito contenido.

No ha cambiado el personal, excepto el bajista pero la batería de Pete Thomas sigue ahí, tensa y siguiendo su propio camino normalmente alejado de la melodía de la canción como si fuera en la canción tres mientras el resto de los músicos apenas van en la dos. Es genial. Los teclados siguen instalados en el sonido de la Farfisa, el preferido de la música Tex-Mex, dando color a las canciones y la guitarra solo brilla en una canción: «What if I Can’t Give You Anything but Love? con una fuerza que ya la quisiera Hendrix.

No todo el material es excelente, las últimas dos baladas no hacen mucho por mí, pero el resto es sólido, un Costello a la altura de los setentas. Increíble el trabajo en «Paint the Red Rose Blue» y esa extraordinaria, mi favorita: «Magnificent Hurt» con su línea de bajo que te recuerda «She Bops» de Cyndi Lauper.

Elvis Costello es una mina cuya veta sigue dando pepitas de oro. Este álbum lo demuestra.

4/5 estrellas.

The Weeknd Sigue Perdido en 1985

Puntuación: 4 de 5.

El primer gran lanzamiento del 2022 viene de la mano del nuestro viejo amigo The Weeknd y es el álbum llamado Dawn FM que es una continuación clara a su After Hours de hace un par de años.

La controversia que lo siguió cuando los premios Grammy no nominaron su anterior álbum a mejor álbum del año, pero si el de Dua Lipa, le sirvió para que su canción «Blinding Lights» fuera nombrada la canción número 1 de todos los tiempos en la lista Billboard destronando a «The Twist» de Chubby Checker ya que estuvo 90 semanas consecutivas en las listas, nada mal para quien ahora jura que jamás dejará que un álbum suyo vaya a los premios Grammy.

La música continúa con los sintetizadores ochenteros en algunas canciones partcularmente en «Gasoline» y la música disco como el incio de «Take my Breath» y en la canción «Sacrifice» y son muestras que se dio cuenta que había sed de música retro y él encantado de no modificar lo que está funcionando y continúa con sus productores asociados haciendo lo mismo que ya le funciona.

El nombre del álbum es porque el formato es el de una radio FM que está transmitiendo esta música y tenemos que el locutor es nada menos que el actor Jim Carrey, que es su amigo, y que al final nos lee un buen poema.

Quien hace su aparición en un monólogo es Quincy Jones hablando de su infancia, muy triste por cierto, y produce una canción que suena a algo que Michael Jackson podía haber cantado. Hay duetos con Lil’Wayne «I Heard You’re Married» y uno particularmente bueno con Tyler, the Creator «Here We Go…Again», una de mis favoritas.

Los temas en sus letras nos hablan de un hombre atormentado por sus amores pasados (Bella Hadid, Selena Gomez) y su adicción a las drogas (motivo por el que lo dejaron) y como pide a su actual pareja (¿Angelina Jolie?) que le tome a mano y no lo deje volver a caer en ellas. Muy triste pero con buena música.

Max Martin, por supuesto ayuda en algunos temas.

Si te gustó el anterior álbum Abel Tesfaye te da mucho mas en este. Una buena producción que da para 4/5 estrellas.

Un Viejo Hippie en el 2022

Puntuación: 3.5 de 5.

Neil Young ha sacado prácticamente un álbum por año (a veces dos) desde el inicio de su carrera en 1968, sin considerar algunas otras producciones como compilados y lados B que ocasionalmente ejecuta. Así que a finales del 2021 no nos iba a defraudar y saca su álbum de estudio número 41.

Es exclusivamente dedicado a quienes hemos seguido de cerca su carrera y que sabemos que los años no lo han hecho menos abrasivo en sus solos de guitarra como lo puedes escuchar perfectamente en «Human Race» en este álbum, sin embargo sus canciones están controladas alrededor de la marca de los tres minutos dejando atrás esos interminables, y llenos de feedback, solos de guitarra a los que nos había acostumbrado. Aquí hay solo una canción de mas de 8 minutos.

Barn es una producción de Neil Young & Crazy Horse digamos un Crazy Horse reformado ya que el guitarrista Frank «Poncho» Sampedro se retiró dos álbumes atrás y su lugar ahora es ocupado por Nils Lofgren, a quien «Poncho» había remplazado hace muchos años (1975).

El álbum ya no suena tan fuerte en la guitarra ya que Lofgren se escucha mas melódico y aun ¿jazz? en ocasiones, sin embargo los años no pasan en balde por todos ellos, y nosotros. El nombre del álbum proviene del granero que Neil Young compró en las montañas de Colorado y que, junto con su esposa, la actriz Daryl Hannah, reformó y transformó en un estudio de grabación donde ha grabado muchos de estos albumes.

Aquí encontrarás un Neil Young mas melódico, y aun cursi, «Don´t Forget Love» no me dejará mentir, y no ganará absolutamente ningún fan nuevo, pero para nosotros es un regalo de fin de año, aunque por carga de trabajo hasta ahora esté escribiendo esto.

Me acordé mucho de Chavela Vargas con su canción «Canerican». ¿Dónde nace un estadounidense? Donde le da su chingada gana. Y aquí justifica ser estadounidense nacido en Canadá.

3.5/5 estrellas.

Caos en Vivo desde Brighton

Puntuación: 3 de 5.

Este es el segundo álbum del grupo alemán Can en aparecer de una serie de 5 o 6 diferentes que harán que quienes no tuvimos la fortuna de estar en uno de sus shows en lo mas alto de su carrera los disfrutemos de alguna manera.

Este álbum está grabado en la ciudad inglesa de Brighton el 19 de noviembre de 1975 llamado precisamente así: Live in Brighton 1975 y nos muestra al grupo promocionando su nuevo y, no tan buen álbum, Landed.

Los integrantes en ese momento eran: Irmin Schmidt en los teclados, Michael Karoli en guitarra, Jaki Liebezeit en batería ya que Damo Suzuki, el vocalista ya había partido a principios de ese año.

Ahora es la batería la que lleva a delante a música, que es un poco mas enigmática y experimental que en su álbum anterior en vivo en Stuttgart y mucho mas reconocible ya que toma ciertos pasajes de canciones como «Vitamin C» o «Quantum Physics» y gira alrededor de ellos instrumentalmente.

Siendo honestos no todos los mas de 90 minutos de música valen la pena, ya que son largos jams en los que alguien suelta una melodía y el resto trata de seguirlo y me quedo con algunos de los 7 movimientos en los que dividen este set, particularmente en el «Drei» (tres) cuya melodía no me puedo sacar de la cabeza, la fuerza del «Vier» (cuatro) y los minutos finales, con su guitarra furiosa del último número «Sieben» (siete).

Un testamento para todos aquellos que hemos sido fanáticos del krautrock y que no vivimos en ese momento la vida de conciertos.

3/6 para esta grabación.