En un reciente desayuno y al explicarle a un amigo que es lo que hacía para vivir, soy blogger, se sorprendió porque no sabía de la existencia de los blogs y sorprendido me preguntó: ¿entoces tienes el poder de hacer que una empresa que no te gusta cierre sus puertas? Por supuesto que no, pero tengo la opción de dar mi opinión de un mal servicio mejor que cualquier persona que no tenga un blog. Su pregunta aun resuena en mi cabeza cuando me entero que en una población de Inglaterra hubo ya una renuncia en masa de los oficiales de ese pueblo porque un blog se había dedicado a criticar su actuación al frente del Ayuntamiento local. Los comentarios de un blog los obligaron a renunciar y ahora deberá haber nuevas elecciones. El blogger se disculpa diciendo que no es responsable de ninguna manera, pero he ahí un blog que si tiene el poder de cerrar un negocio, aunque en este caso es un Ayuntamiento, ahí tienes tu respuesta Jesús.