He trabajado muy de cerca de una Orquesta Sinfónica (OSSLA) y de un excelente músico contemporáneo por lo que se de primera mano lo caras que suelen ser las partituras con las cuales trabajar. Requieren una inversión importante no se trata solo de copias fotostáticas sino de derechos por lo que me gusta mucho el hecho de que alguien esté tomando el camino open source en ese terreno también. Ese alguien es la pianista japonesa Kimiko Ishizaka quien a bordo de un Bösendorfer 290 Imperial ha grabado una nueva versión de las Variaciones Goldberg de Bach.
La idea detrás de esto es que fuera fundada por donaciones y el resultado de la grabación fue realizado con un programa código abierto por lo que al final la obra es gratuita de copiarla, distribuirla o utilizarla de la manera que lo requieras.
Una gran obra, seguramente y estaremos escuchando esta versión en casa los próximos dias para analizarla.