En un artículo que parece copiado de un libros de Michael Crichton la revista The Economist revisa las novedades que en materia de genética se están generando en estos días. Primero salió la empresa islandesa deCODE Genetics que ha desarrollado pruebas para revisar via Internet tu ADN y compararlo contra su base de datos que te dice cuales son las probabilidades de que desarrolles una enfermedad. Por otro lado la empresa 23andMe, fundada por alguien muy cercano a Google, y que te permite enviar un Q-Tip con una muestra de tu saliva para ser analizado y puedas revisar en un sitio seguro de donde provienen tus ancestros (tal vez te muestren el árbol en que se columpiaba el australopitecus que te antecedió) y además una lista de las enfermedades mas seguro que desarrolles de acuerdo a tu patrón genético, por otro lado habrá además un espacio como de Geno-Facebook donde te conectarás con personas de todo el mundo que comparten algunas características (Háganme el refabrón cabor). Todo es muy bonito y muy nice como le explicaba a mi hija Norah anoche (ella está emocianada por la noticia), pero las aseguradoras, los empleadores o los prospectos de marido podrán en teoría negarte un servicio (el matrimonio como servicio, he ahí una idea interesante) porque se enteran que es probable que desarrolles algún día una enfermedad como cáncer o del corazón y ahí estarían atentando contra la libertad individual. O ¿que opinan?