Un mucho mejor libro que la primera parte de la serie llamada «Mundo Hecho a Mano» y que es una cita bíblica sobre un mundo en el que todo debe de recrearse.
En esta segunda entrega el escritor James Howard Kunstler nos sigue contando la historia de lo que sucede en un poblado al Norte del estado de Nueva York en Estados Unidos cuando el mundo ha entrado en una fase pos-apocalítica después de dos bombas atómicas que han destruido Washington y Los Angeles y dos diversas pandemias han azolado el mundo; una de gripe y otra de encefalitis y solo queda una parte de la población para defenderse en un mundo que ya no tiene luz, ni agua potable ni gasolina para moverse.
Me ha gustado mucho mas la prosa que se maneja aquí y la historia avanza de una manera diferente siendo el protagonista ahora un niño de 11 Años que huye de su casa para recorrer los caminos y termina de compañero de un asesino.
Tenemos los mismos habitantes: el viudo Robert Earle, protagonista del primer libro y ahora presidente municipal de Union Grove y Loren, el pastor metodista transformado en algo así como comisario del pueblo, sin embargo la carga narrativa la lleva el pequeño de 11 Años que nos muestra lugares donde la civilización ha desaparecido por completo y las personas buscan sobrevivir como pueden.
La magia, la adivinación y el sexo son ahora la nueva normativa y The Witch of Hebron es una antigua modelo que vive sola en una inmensa casa y es visitada por hombres que necesitan sus poderes de una manera u otra.
Muchos sentirán repulsión por el sexo entre un niño de 11 Años y una niña de 13, pero a quienes han pasado por un apocalipsis no creo que les importe mucho.
3.5/5 para este segundo libro de la serie.
En esta segunda entrega el escritor James Howard Kunstler nos sigue contando la historia de lo que sucede en un poblado al Norte del estado de Nueva York en Estados Unidos cuando el mundo ha entrado en una fase pos-apocalítica después de dos bombas atómicas que han destruido Washington y Los Angeles y dos diversas pandemias han azolado el mundo; una de gripe y otra de encefalitis y solo queda una parte de la población para defenderse en un mundo que ya no tiene luz, ni agua potable ni gasolina para moverse.
Me ha gustado mucho mas la prosa que se maneja aquí y la historia avanza de una manera diferente siendo el protagonista ahora un niño de 11 Años que huye de su casa para recorrer los caminos y termina de compañero de un asesino.
Tenemos los mismos habitantes: el viudo Robert Earle, protagonista del primer libro y ahora presidente municipal de Union Grove y Loren, el pastor metodista transformado en algo así como comisario del pueblo, sin embargo la carga narrativa la lleva el pequeño de 11 Años que nos muestra lugares donde la civilización ha desaparecido por completo y las personas buscan sobrevivir como pueden.
La magia, la adivinación y el sexo son ahora la nueva normativa y The Witch of Hebron es una antigua modelo que vive sola en una inmensa casa y es visitada por hombres que necesitan sus poderes de una manera u otra.
Muchos sentirán repulsión por el sexo entre un niño de 11 Años y una niña de 13, pero a quienes han pasado por un apocalipsis no creo que les importe mucho.
3.5/5 para este segundo libro de la serie.