Si el caso de una cárcel es penalizar entonces no debería serle permitido a un preso el manetener un hobby en el que pueda involucrar a otros presos especialmente si tiene que ver con violencia y juegos de fantasía. Mas o menos esas fueron las palabras que un juez le dijo a un preso de 33 años llamado Singer que es devoto del juego Dungeons and Dragons desde que era niño y que vio su colección de álbums, libros, revistas y muñecos confiscada cuando se supo que estaba conspirando con otros presos en actuar los roles de fantasía dentro de la prisión. Asi que no solo es prisión física, es prisión mental a la que se enfenta, y todo por haber matado a otro hombre y a que le dieron cadena perpetua. Tu opinión ¿cual es?