Un jugador de World of Warcraft que estaba «chateando» mientras jugaba con un empleado de la compañía le hizo un comentario de que «él estaba en estado suicida y que el juego era lo único por lo que quería vivir» Por supuesto el empleado se comunicó inmediatamente al 911 y les pasó la dirección IP del cliente y éstos lo visitaron para asegurarse de que estuviera bien. El cliente les dijo que había sido una broma, pero la policía que nunca tiene sentido del humor le ha hecho un cargo por mal comportamiento en primer grado. Por supuesto que ya ha habido suicidios en vivo en Internet y los seguirá habiendo pero la preocupación es el constante aislamiento en el que viven los gamers no solo de WoW sino de todos los demás.