Es difícil encontrar un CEO mas simpatético que Eric Schmidt. Un tipo que tomó el estrado para ser entrevistado en un ciclo de conferencias llamadas D9 y en el que presionado por la periodista que lo estaba entrevistando concedió que todo el fracaso de Google en medios sociales fue totalmente su culpa.
No tenía porqué haberlo hecho, pero habla muy bien de él el hecho de reconocer que estuvo muy enfocado en el dia a dia de la empresa como para darse cuenta del riesgo que corría con el crecimiento de Facebook o LinkedIn.
Lo dice muy claro:
Claramente sabía que tenía que hacer algo y fallé en hacerlo. Los CEOs tenemos que tomar responsabilidad. Lo eché a perder.
Nadie esperaba este mea culpa de parte de un personaje tan querido en la industria pero es bienvenido ya que en la actualidad es bastante difícil encontrar humildad en este medio.
Veremos como le va a Larry Page ahora que ha tomado de nuevo las riendas de la empresa.