Es difícil saber que hacer con personas como Samina Malik de 23 años y empleada en una librería en un aeropuerto, ya que en realidad no es culpable de ningún acto terrorista per se y fue sentenciada a nueve meses de sentencia suspendida y servicio comunitario. ¿Su crimen? Poseer ejemplares, que bajó de Internet, de «El Manual de Al-Quaeda» y «El Manual Muhjaedin de Venenos». Ella se hacía llamar «La terrorista lírica» en los chats de Internet y creaba letras de canciones de rap que hablaban de descabezar cristianos y enseñarles su lugar en el mundo. Pero ¿Estaba planeando poner bombas? ¿Destrurir algunas torres de oficinas? ¿Matar a Bush? Por supuesto que no. Su crimen fue poseer libros indebidos en los tiempos que corren. ¿Estamos regresando a la Edad Media? ¿Hay un canon de libros prohibidos del que debemos estar pendientes? ¿Quien decide cuales son los libros peligrosos de poseer? Me interesaría estar al tanto de esa lista. ¿Viene Harry Potter? Lo interesante es que el gobierno británico estudia subir de 28 a 42 días en prisión para cualquier sospechoso de terrorismo sin necesidad de levantar cargos. ¿Así o mas fascista?
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Alguien que si está utilizando Google Earth
Los que están felices de aprovechar la nueva tecnología que Google tiene para ofrecer al mundo no son los empresarios, ni los tecnólogos sino los terroristas, o liberadores dependiendo de si usted lee el Corán o la Biblia como libro de cabecera, ya que de acuerdo a los miembros de la Brigada Palestina de Mártires de al-Aqsa han aprovechado al máximo toda la información detallada que sobre Israel ha estado apareciendo en Google Earth para planear con cuidado sus ataques. De tal manera que el sol sale para todos en cuestión de tecnología. Es increíble el lalcance que están teniendo ya los productos de Google en el mundo.