Hace 5 años me tocó recibir la visita de Jorge Molina de Google aquí en Culiacán, Sinaloa, México por un dia completo en el que lo llevé a dar una conferencia sobre «La Nube» en la Torre Académica de la Universidad Autónoma de Sinaloa y lo puse en contacto con la Oficina Tecnológica del Gobierno del Estado de Sinaloa.
Una gran experiencia en la que compartimos muchos puntos de vista sobre lo que la empresa estaba realizando y los planes hacia el futuro y en el transcurso de la cual decidí cambiar mi camino hacia líder del SEO local basado en lo que comentamos por lo que creé distintos canales de distribución de contenido local para hacerlo: Mi Universidad Culiacán (todo lo que hay que saber sobre el ambiente universitario de la ciudad), Mi Auto Culiacán (Lo mejor del ambiente automotriz local) Vida de Lujo Culiacán (Antros y Restaurants de la ciudad).
Una decisión interesante y en un momento en el que eso era sencillo.
Los Años Dorados
En efecto Google tuvo una época en la que el Don’t Be Evil se aplicaba a todo lo que hacían y quien quería jugar el juego del SEO lo podía hacer con tranquilidad y obtener resultados sorprendentes con herramientas básicas: unos cuantos blogs falsos, comentarios dejados en las noticias de los periódicos, Delicious y algunos trucos mas (Enchílame, Digg, etc.) con lo que podías posicionar cualquier página que quisieras en los términos que necesitaras. Se nos veía en la calle con el respeto con el que uno ve a Batman o Spider-man.
Siendo honestos, era una época falsa ya que los resultados que Google entregaba no eran los relevantes sin los que nosotros los SEO Wizards le suministrábamos y aunque fuimos felices sabíamos que muy cerca estaba el final de nuestro camino.
En mezcla obtenía 120,000 vistas mensuales a mis páginas de una ciudad de 750,000 habitantes mas 120,000 vistas mensuales a este blog tecnológico con lo que podía tener en 4 meses un Millón de ojos siguiendo lo que se escribía por un equipo de trabajo de… 1 persona (moi).
Panda Years
Todo lo bueno llega a su fin y en menos de lo que digo ¡Kung Fu Panda! se acabó mi imperio. Mis visitas cayeron estrepitosamente a una cuarta parta de lo que existía y aunque he luchado por recuperar no lo he logrado del todo. Las reglas han cambiado y un equipo de un hombre no puede vencer una empresa como Google para las 9 páginas web que administro. Habían llegado los Panda Years y comencé a luchar contra la injusticia al mismo tiempo que trabajaba 12 horas diarias en otras cosas mas productivas.
El SEO ahora paso de ser un arte a ser ciencia-ficción mas barroca que lo que Julio Verne imaginó. Ya no podía lograr magia, el mito del «Good content trumps Good SEO» había llegado para quedarse y solo Dios y la Virgen de Guadalupe saben que quiere decir eso.
No voy a hablar de Hummingbird y demás el caso es que actualmente es sumamente difícil crear esa magia a la que estábamos acostumbrados y Google no ayuda ya que tiene la tendencia a incrustar sus mapas, a poner sus ads por encima y ahora con los perfiles de Google+ y Google My Business el primer resultado de una búsqueda local viene quedando a media página si bien te va, por lo que el cliente se confunde.
La verdad es que nunca funcionó muy bien el ser SEO Wizard para una ciudad pequeña como Culiacán. Los empresarios aun no entienden de que se trata y por supuesto pagan gustosos $1,700 USD por una anuncio de tamaño medio en una revista hermosa de circulación limitada y me escatiman los $45 USD por hora que se cobra por asesoría en SEO y Social Media (asi de bajo hemos caido).
El Audi A4 soñado se aleja cada vez mas de mi vida y solo basta afinar muy bien el Nissan Tiida 2007 que poseo. Al final no puedo echarle la culpa de eso a Jorge Molina. Buen amigo pero muy mal consejero de negocios. Jorge ¡Vamos poniendo unas tortas con recetas del GooglePlex en medio de la ciudad!